domingo, 31 de julio de 2016

Siete libros machistas

No voy a dedicar estas líneas a libros que incitan intencionadamente al machismo, como esos escritos por líderes religiosos que adoctrinan a la mujer sobre cómo ser sumisa y servir a su marido. Tampoco hablaré de los libros sagrados o de los de autoayuda.

Simplemente pretendo seleccionar unas cuantas novelas que, queriéndolo o no, alientan o describen los estereotipos machistas que todos debemos temer y criticar. Como veréis me ha salido una lista muy heterogénea. Da un poco de repelús encontrarse juntos grandes clásicos con algunas chapuzas literarias (sin ánimo de ofender, pues siempre admiraré a quien es capaz de terminar una novela), pero en todos encuentro sexismo más o menos escondido.

1. Orgullo y prejuicio, Jane Austen (1813). La novela predecesora de las comedias románticas actuales, cuya trama principal nos muestra a dos jóvenes que se conocen y se caen mal al principio, pero que, con el tiempo y las vicisitudes, descubrirán su amor. Retrata una sociedad machista en la que la herencia se transmitía únicamente a los varones, por lo que las mujeres estaban obligadas a contraer matrimonio con un hombre acomodado para poder vivir bien. Muy recomendable, aunque hay que entrar en ella con calma, pues mantiene un tono reposado diferente al que se usa hoy en día en la literatura.

2. Fundación, Isaac Asimov (1951-1953). Me refiero aquí a los tres libros que forman el ciclo de Trántor (Fundación, Fundación e Imperio y Segunda Fundación), aunque el autor ruso incluyó después varios relatos más en la serie. Hablamos de unas magníficas novelas de ciencia ficción, con grandes dosis de elementos sociopolíticos y geoestratégicos, que sentaron las bases para numerosas obras posteriores. Sin embargo, no acertó Asimov en la predición de un futuro machista, en el que todos los personajes que tienen poder son masculinos y el sexo femenino no ha accedido a cargos importantes a pesar de haber transcurrido miles de años. No obstante, las únicas dos mujeres cuyos personajes son trascendentes en la trilogía, Bayta y Arkady Darell, son inteligentes, fuertes y osadas como el que más.

3. Casino Royale, Ian Fleming (1953). La primera novela sobre el personaje de James Bond. Un relato ligero, que hay que leer con distanciamiento. Inauguró una manera de contar fijándose en los detalles y las marcas, que reflejaba el cosmopolitismo del personaje, anticipo de la globalización. Fleming, además, introduce entre las aventuras reflexiones sobre el bien y el mal y sobre la guerra fría y sus consecuencias. Pero el agente 007 es mujeriego y machista y trata a las mujeres como objetos. A pesar de ello, todas caen rendidas ante la más fugaz mirada del icónico espía.

4. La novia cautiva, Johanna Lindsey (1977). La primera novela de una de las reinas del género romántico contiene el secuestro y el abuso físico y sexual de su protagonista por parte de un supermacho al que ella no se podrá resistir y del que acabará enamorándose locamente. Apología del maltrato y del machismo en estado puro. Existen grandes novelas que hablan de romances. Por favor, no lean esta, a pesar de que se sigue reeditando.

5. Crónica de una muerte anunciada, Gabriel García Márquez (1981). Con un estilo cercano al periodismo, el gran autor colombiano reconstruye el relato de un asesinato de connotaciones claramente machistas ocurrido en los años 50 del pasado siglo. Una mujer, casada en un matrimonio concertado, es repudiada por su marido al descubrir que no es virgen. Coaccionada por la familia, acusa a un hombre, al que los hermanos de ella se ven obligados a matar para salvar el honor. Reflejo de una sociedad autoritaria y sexista que, desgraciadamente, se sigue reproduciendo en muchas partes del mundo actual. Una de las mejores novelas cortas que nunca podréis leer.

6. Cincuenta sombras de Grey, E.L. James (2011). Novela supuestamente erótica, tildada de porno para madres, en la que una joven es introducida en el mundo del sadomasoquismo por un rico y elegante triunfador. Otro de esos fenómenos literarios que leen aquellos que nunca leen. Es considerada machista porque reduce el acto sexual a un hecho consumista, alienta el maltrato y el acoso y presenta la violencia de género como algo apetecible ya que, gracias a su sumisión, la protagonista asciende en la escala social. Esta normalización de los abusos en la literatura o el cine crea un contexto en el que se sustenta la violencia machista de nuestras sociedades.

7. After, Ana Todd (2013). Es bastante cutre que en el siglo XXI triunfen novelas con los tópicos de la chica buena que se enamora del malote posesivo que la humilla y manipula y que es celoso hasta el extremo. Pero lo peor es que estos libros estén dirigidos a adolescentes, que pueden pensar que es normal que tu pareja te diga cómo debes vestir, que te grite constantemente y que controle tus amistades y hasta tu móvil. Y todo se perdona porque él dice que la quiere, pero sus hechos y sus palabras no concuerdan en absoluto. Estos libros inoculan el machismo en las mentes jóvenes y luego es difícil sacarlo de ahí.

martes, 5 de julio de 2016

Siete canciones de los Beatles inspiradas en obras de música clásica

Ya hablé en otra entrada de la canción Because de los Beatles y de la leyenda según la cual se trata de la sonata Claro de Luna de Beethoven con los acordes al revés, tras haber escuchado Lennon a Yoko Ono interpretar al piano la pieza de Ludwig van.

Vamos a buscar otras canciones de los cuatro de Liverpool que han sido inspiradas, que coinciden en alguna melodía o que se parecen a obras de la música clásica. Veréis que la mayoría de la música en que se inspiraron los Beatles era barroca. Es bastante lógico, pues se trata de una música sencilla de apreciar y muy florida, que guarda bastante relación con el rock and roll.

1. P.S. I love you, cara B del primer sencillo de los Beatles, publicado el 5 de octubre de 1962, fue escrita por Paul McCartney mientras se encontraba en Hamburgo en el año 1961. Quizás escuchó allí, quizás en su propia casa, influido por su padre, el segundo movimiento, adagio, del tercer concierto para violín, K 216 de Mozart, y por eso coinciden los primeros compases de su canción con los de la bella melodía del tema principal de la obra del gran Amadeus. Curiosamente, ambas fueron escritas por sus autores a la edad de diecinueve años.

2. Yesterday es seguramente la canción más famosa de los Beatles. Supuso varios cambios en la carrera del grupo. Fue la primera que grababa un miembro en solitario (Paul con su guitarra). Fue la primera vez que se usó un cuarteto de cuerdas para un grupo de rock (idea del legendario productor George Martin) y atrajo a un público más adulto. Por cierto, uno de los primeros en usar el cuarteto de cuerdas con guitarra fue el compositor italiano del siglo XVIII, afincado en Madrid, Luigi Boccherini, como en este Quinteto en re mayor.

3. In my life apareció en el disco Rubber Soul en diciembre de 1965. Está compuesta por John Lennon, aunque Paul reivindica que participó en la letra y en la música. La parte clásica (barroca más bien) es el solo de piano, inspirado en El clave bien temperado, de Bach. Como esta es una obra inmensa, que tenía una finalidad didáctica, por lo que contiene preludios y fugas en las 24 tonalidades de la música occidental, únicamente os pediré que comparéis el solo de la canción (parece que escrito por George Martin), con la música que suena a partir del minuto 1:45 de la obra de Bach.

4. Eleanor Rigby fue compuesta por Paul McCartney en 1966. El resto de los componentes de la banda echaron una mano, sobre todo con la letra. Supone una evolución en la música de los Beatles, pues no tocan ellos los instrumentos, sino que un octeto de cuerda acompaña a las voces. Parece que en esa época Paul estaba escuchando las cuatro estaciones de Vivaldi, influido por su novia en aquel momento, Jane Asher. De este ciclo de cuatro conciertos para violín y orquesta, los violines usados en Eleanor Rigby me recuerdan al primer allegro del invierno, aunque George Martin afirmaba que se inspiró en cómo sonaba la cuerda en las bandas sonoras que Bernard Hermann compuso para Psicosis o Farenheit 451.

5. Penny Lane fue escrita por Paul McCartney en 1966 y editada en 1967 en un sencillo, junto con Strawberry Fields Forever. Está dedicada a una calle de Liverpool y, para el famosísimo solo de trompeta piccolo, Paul se inspiró en una transmisión que vio del segundo concierto de Brandemburgo, de Bach, con el solista Dave Mason. Por eso invitó a este mismo instrumentista a participar en la grabación. Este es uno de los seis conciertos para diversos instrumentos que Johann Sebastian dedicó al marqués de Brandemburgo en 1721 y que había compuesto mientras era maestro de capilla en Köthen.

6. She's leaving home  apareció en el álbum Sargent Pepper's Lonely Hearts Club Band. Habla de una chica que abandona a sus padres y huye con un hombre. Paul escribió la melodía principal (lo que la chica hace y piensa) y John los coros (la parte de los padres). Los Beatles no tocan aquí los instrumentos, que son una sección de cuerdas y un arpa. Tiene un tiempo de tres por cuatro, de "valsesito" lento o mazurca, con una melodía melancólica de la que el reputado compositor y escritor Ned Rorem dijo que habría sido digna de Schubert o de Chopin, como la del Vals del adiós, que el músico polaco no publicó en vida, ya que le parecía demasiado simple y que, según se dice, dedicó a una novia antes de separarse de ella.

7. Blackbird fue compuesta en 1968 por Paul McCartney para el álbum blanco. Trata sobre el racismo y está inspirada en la Bourrée en mi menor BWV 996 de Bach, que es, como se puede apreciar, uno de sus compositores favoritos. El propio McCartney reconoció esta influencia en un programa de televisión de 2006 y tocó unos compases de la pieza de Bach (aunque cambiando algunas notas). Esta Bourrée es el quinto movimiento de una suite para laúd, y se ha hecho famosa porque todos los guitarristas clásicos (y muchos roqueros) la saben tocar.

Podemos encontrar influencia directa de la música clásica en otras canciones de los Beatles, como Piggies, Strawberry fields forever, For no one, All you need is love, A day in the life o I am the walrus.