lunes, 6 de julio de 2020

¿A qué partido debemos votar los católicos en España?

En una película francesa de 2018, titulada Fortuna, la policía suiza llega a un monasterio para detener a personas que han cruzado el Mediterráneo huyendo de África y que han sido acogidas por los monjes, quienes, tras el incidente, se reúnen para dilucidar si deben seguir las enseñanzas de Jesucristo y continuar acogiendo refugiados, o ponerse del lado del gobierno de su país y rechazarlos. Como católico, también me pregunto qué partido es el que lleva en su programa un contenido que se compadezca con mis convicciones cristianas.

La Biblia está llena de mandamientos y prescripciones para los que la seguimos. Sin embargo, Jesús nos dejó un único mandamiento que engloba y sustituye a todos los demás, en Juan 13:34: "Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros."

Jesucristo no nos dijo que celebráramos procesiones o romerías. Sólo dijo que amemos a los otros. Claro y sencillo, pero difícil de seguir. Porque ese otros engloba a todos los otros. No sólo a nuestros amigos, sino también a nuestros enemigos, no sólo a nuestros compatriotas, sino también a los nacidos en otros países, no sólo a los blancos, sino también a los que tienen otro color de piel, no sólo a los ricos, sino también a los pobres.

Amar únicamente a los que nos aman, a los más próximos o a los que se parecen a nosotros, no supone ningún esfuerzo. Jesucristo nos pide algo más. No podemos (no debemos) adaptar la religión católica a nuestros gustos. Si seguimos a Jesús, debemos hacerlo con todas las consecuencias.

Por ello, vamos a repasar los programas con los que los partidos más votados en mi circunscripción electoral (Madrid) se presentaron a las últimas elecciones generales en España, para ver cuáles se aproximan más al mandamiento de que nos amemos los unos a los otros, observando cómo tratan a los que son más "otros" que los demás: los y las inmigrantes pobres, quienes tienen una sexualidad diversa, las personas con discapacidad y las mujeres. Vamos a valorar de 0 a 2,5 lo que cada partido propone sobre cada uno de estos cuatro grupos de personas:

1. Partido Socialista Obrero Español (PSOE): 6,50 puntos.
- Inmigrantes pobres: Derecho de asilo, nacionalidad y regularización más ágil. Buenas palabras pero poco concretas. 1,5 puntos.
- Diversidad sexual: Ley contra para la igualdad de trato y la no discriminación, plan de acción contra los delitos de odio. Bien. 2 puntos.
- Personas con discapacidad: Reforma del artículo 49 de la Constitución. Poco concreto. 1 punto.
- Mujeres: Igualdad de oportunidades en el empleo, lucha contra la violencia machista, derechos sexuales y reproductivos. Bastante bien: 2 puntos.

2. Partido Popular (PP): 3,50 puntos.
- Inmigrantes pobres: Lucha contra la inmigración ilegal. Contrario a los que Jesucristo nos enseñó: 0 puntos.
- Diversidad sexual: No he encontrado ninguna referencia. 0 puntos.
- Personas con discapacidad: Promoción de la inserción laboral. Planes de accesibilidad, ocio y tiempo libre. Bien. 2 puntos.
- Mujeres: Igualdad de oportunidades en el empleo, lucha contra la violencia de genero. Bien, pero faltan los derechos sexuales. 1,5 puntos.

3. VOX: 0,50 puntos.
- Inmigrante pobres: Deportación. Opuesto completamente a lo que Jesucristo proclamó: 0 puntos.
- Diversidad sexual: No he encontrado ninguna referencia. 0 puntos.
- Personas con discapacidad: Tratar a las personas con síndrome de Down como personas sin discapacidad. Discutible pero interesante. No hay referencia a otras personas con discapacidad. Muy pobre. 0,5 puntos.
- Mujeres: Anulación de la ley de violencia de género. Jesús siempre defendió a las mujeres frente al acoso que sufrían por parte de los hombres: 0 puntos.

4. Unidas Podemos (UP): 7,5 puntos.
- Inmigrantes pobres: Reforzar el salvamento marítimo en el Mediterráneo. Garantizar el derecho de asilo. Cerrar los CIE. Ley contra la trata de personas. Acceso universal a la salud. Derechos de los niños migrantes. Bien: 2 puntos.
- Diversidad sexual: Protocolo contra la LGTBIfobia. Educación afectivo-sexual. Ampliación de derechos de lesbianas, gais, transexuales e intersexuales. Reconocer la diversidad familiar. Bien: 2 puntos.
- Personas con discapacidad: Reformar el artículo 49 de la Constitución. Educación inclusiva. Poco concreto: 1 punto.
- Mujeres: Plan Estatal de Lucha contra las violencias machistas, asignatura de feminismos, paridad en las Administraciones Públicas. Sólo sí es sí. Erradicar la trata y la explotación sexual. Acabar con la brecha salarial. Proteger a las familias monoparentales. Muy bien: 2,5 puntos.

5. Ciudadanos (Cs): 5,00 puntos
- Inmigrantes pobres: Sistema de visado por puntos. Contrario a las enseñanzas de Jesucristo: 0 puntos
- Diversidad sexual: Ley que promueva la igualdad para las personas LGTBI. Bien pero no completo: 1,5 puntos.
- Personas con discapacidad: Educación inclusiva. Igualdad y plena inclusión. Plan de apoyo en el empleo. Bien: 2 puntos.
- Mujeres: Bonificaciones en la Seguridad Social. Acabar con la brecha salarial y la discriminación laboral. Ley contra la violencia sexual. Cumplimiento de la Ley contra la violencia machista. Bien, pero faltan algunos derechos sexuales. 1,5 puntos.

6. Más País: 7,00 puntos.
- Inmigrantes pobres: Protección de los inmigrantes menores de edad. Escaso: 0,5 puntos.
- Diversidad sexual: Plena igualdad de las personas LGTBI. Medidas sanitarias y legales. Bien: 2 puntos.
- Personas con discapacidad: Ley de vida independiente. Modificación de la Constitución. Políticas de empleo y fiscales. Bien: 2 puntos.
- Mujeres: Lucha contra la brecha salarial. Trabajadoras del hogar. Lucha contra la violencia machista. Medidas transversales de género. Ley de violencia sexual y de trata. Estrategia de salud sexual y reproductiva. Muy bien: 2,5 puntos.

7. PACMA (Partido animalista contra el maltrato animal): 6,50 puntos.
- Inmigrantes pobres: Acceso a educación y sanidad. Programas de acogida y contra la xenofobia. Voluntarista pero sin medidas legales. 1 punto.
- Diversidad sexual: Leyes integrales de transexualidad y LGTBI. Inclusión de las familias LGTBIQ+ en las políticas sobre familias. Bien: 2 puntos.
- Personas con discapacidad: Plan de atención sociosanitaria. Eliminación de barreras arquitectónicas. Faltan medidas legales concretas: 1,5 puntos.
- Mujeres: Lucha contra la violencia machista. Igualdad de oportunidades en el empleo. Bastante bien: 2 puntos.

jueves, 18 de junio de 2020

Sincronicidad. La soledad del corredor de fondo

Desde hace muchos, muchos años, tengo la costumbre, casi diría la adicción, de ver al menos una película todos los días.

Empecé muy joven viendo las películas que ponían en la dos (en aquel momento, el UHF). Después me aficioné a los ciclos de la primera (en aquel momento, la normal), como aquél tan recordado de cine negro americano. Más tarde apareció el VHS y los videoclubs. Luego los DVD, ahora las plataformas. Siempre he compaginado todas esas formas de ver cine con la legítima de acudir a las salas.

A estas alturas, ya he visto casi todos los clásicos que me interesaban, y suelo dedicar mi tiempo a ver películas nuevas. No obstante, hay veces que no tengo nada nuevo, como me sucedió el 26 de mayo de 2020. Ese día me decidí por un clásico inédito para mí. La película se titula La soledad del corredor de fondo, es de nacionalidad británica, y fue dirigida en el año 1962 por Tony Richardson.

Se trata de la historia de un joven rebelde de clase trabajadora, que es internado en un reformatorio por un robo. Allí descubren sus capacidades como atleta. Está muy bien contada, con el estilo seco de la época, y contiene un mensaje, que en aquellos tiempos podría ser rompedor, aunque ahora resulta inocente, sobre la rebeldía del hombre contra el sistema. No obstante, disfruté y sufrí con las desventuras de su protagonista, Smith.

Paul Auster es mi escritor favorito del siglo XXI, y uno de mis escritores favoritos de todos los tiempos. Su prosa es clara, pero puede ser también profunda. Domina la escritura y siempre sabe cómo decir lo que quiere decir. Y, además, lo que quiere decir es muy interesante. Sabe explicarte los sentimientos humanos con sencillez, y te llega.

Estoy leyendo su última novela, titulada 4 3 2 1. Es la historia de Archie Ferguson, un judío neoyorquino de clase media nacido en 1947. La gracia de la novela es que la vida de Archie, en un momento dado, se ramifica en cuatro, y en cada una de ellas nuestro protagonista se enfrenta a distintas vicisitudes. Por eso puede ser un tanto engorrosa de leer, pero para mí ha sido muy gratificante.

Pues resulta que el día 28 de mayo de 2020, dos días después de haber visto La soledad del corredor de fondo, desemboco en la página 401 de mi novela, en la que un jovencito Archie Ferguson va al cine con una novieta a ver la misma película y queda maravillado. Durante media página, el protagonista del libro de Auster explica cuánto le gustó la película inglesa. ¿Casualidad? No. Sincronicidad.

La sincronicidad, término acuñado por Jung, es una conexión que las personas establecemos con nuestro entorno, de manera que, en determinados momentos, influimos en él creando situaciones coincidentes que tienen un significado simbólico para nosotros, como individuos o como colectivo. La casualidad no existe, la simultaneidad surge para solucionar nuestras necesidades más profundas.

Por eso, esta sincronicidad que he experimentado debe servirme para mejorar mi vida. El problema es que no sé si debo empezar a correr maratones, si debo rebelarme contra el sistema que me oprime, si debo robar en una tienda o si debo dejar de leer tonterías en internet.

jueves, 4 de junio de 2020

Las siete mejores películas de animación

No hago ascos a una película de animación. Procuro ver casi todas las que se estrenan, incluso las más infantiles. Relacionaré a continuación las películas de dibujos que más me han marcado, tanto en mi vida como en mi afición al cine. Hay muchas más que podría haber elegido, como Shrek, Gru, mi villano favorito, Alicia en el país de las maravillas, Los increíbles, Blancanieves y los siete enanitos, Buscando a Nemo, Frozen, Aladdin, Peter Pan, Chicken run o Fantasía

1El libro de la selva (Wolfgang Reitherman) (1967). La primera de mis películas favoritas quizá pueda ser discutible por su calidad. También por el racismo inserto en la misma, pues los monos hablan con un acento africano raruno y la canción del Rey Louie puede simbolizar un nativo africano queriendo ser como un niño blanco. Sin embargo, está en mi lista porque es la primera película que vi en el cine, cuando tenía cinco años, y me marcó para siempre. Aquello fue una de las cosas más maravillosas que me habían sucedido. Pasé miedo con el tigre, incluso con los buitres, reí, canté y me enamoré a la vez que Mowgli. Desde entonces no he salido de las salas de proyección. Nota de 7.

2Akira (Katsuhiro Otomo) (1988). Película de culto del anime ciberpunk, nos cuenta una historia ambientada en el año 2019, sobre un Tokyo postapocalíptico y la búsqueda del arma definitiva. Sus ingredientes son violencia gratuita a raudales y una animación muy trabajada, que consigue una estética eternamente copiada (u homenajeada), incluso en películas de acción real. Es posible que no haya envejecido muy bien, pero en su época me dejó con la boca abierta, porque hasta entonces no había presenciado nada similar. Nota de 7,5.

3. Mi vecino Totoro (Hayao Miyazaki) (1988). Una película muy bonita, tanto en el plano visual como en el narrativo, sobre dos niñas que, al trasladarse a vivir al campo, conocen a un espíritu del bosque. Allí vivirán las alegrías y los sinsabores de la infancia. Con gran atención al detalle, Miyazaki comenzó a asombrar a la comunidad cinematográfica. Totoro es ya un icono cultural mundial. Nota de 8.

4. La bella y la bestia (Gary Trousdale, Kirk Wise) (1991). Es esta, para mí, la mejor película de animación de todos los tiempos. Con ella reí, lloré (ese baile en el salón), y disfruté como un niño, con una historia ya conocida pero narrada con el lujo y la maestría de los grandes clásicos de Hollywood. En su momento me sorprendió que los protagonistas no tenían un rostro perfecto, lo que les hacía más humanos. Nota de 8,5 para una película llena de magia.

5. Pesadilla antes de Navidad (Henry Selick) (1993). Realizada con la técnica de marionetas stop-motion, se trata de un cuento para pequeños y mayores. Tiene un aire gótico con toques expresionistas, y representa la culminación del imaginario cinematográfico de Tim Burton. Con un diseño de personajes muy creativo, buenas canciones y dirección firme, consigue ser original y visualmente muy atractiva. A pesar de que la historia tiende a ser algo convencional, su visionado es imprescindible, aunque sólo sea por su protagonista, el ínclito Jack Skellington. Nota de 8.

6. Toy Story (John Lasseter) (1995). Todos aclamamos las novedades técnicas de la primera película realizada completamente con efectos digitales. Pero, además, en un estilo clásico y emocionante, la cinta relata una historia que atrapa desde el principio y llega a un final perfecto, gracias a su guion milimétricamente construido. Además, te garantizo que puedes ver con tranquilidad las secuelas, porque están casi al mismo nivel de la película original. Nota de 8,5.

7. El viaje de Chihiro (Sen to Chihiro no Kamikakushi) (Hayao Miyazaki) (2001). De obra maestra puede clasificarse esta película, que desborda imaginación, sumergiendo al espectador, junto a la pequeña protagonista, en un mundo mágico, lleno de dioses de la mitología sintoísta, brujas, cerdos, dragones y todo tipo de seres pequeños y grandes. El viaje es espiritual, inquietante, por momentos terrible, pero muy tierno en otros. Además, la película enseña a los niños a respetar la naturaleza, a colaborar con los demás y a no ser avariciosos. Maravillosa. Nota de 8,5.

jueves, 21 de mayo de 2020

Siete países con renta mínima vital

Ahora que a España puede llegar un tipo de renta mínima vital para los ciudadanos más pobres, vamos a ver cómo les ha ido a otros países que la han probado. La renta mínima vital es una cantidad que se entrega a ciertas personas que cumplen determinadas condiciones (normalmente, que sean pobres). Pero ninguno de estos países ha instaurado todavía la renta básica universal, que es un modelo de seguridad social en el que todos los ciudadanos, sin condición alguna, perciben un dinero que les sirve para cubrir sus necesidades básicas.

1. Finlandia. En este país nórdico se ha probado en los últimos años un experimento socioeconómico. Se eligió a 2.000 personas desempleadas a las que se les concedió una renta básica de 560 euros mensuales durante dos años. Pasado ese período se analizaron los resultados, comparándolos con otras personas que no recibieron nada. Se concluyó que la renta básica no desincentiva el empleo, pero tampoco incrementa la posibilidad de encontrarlo. Es decir, que los perceptores buscaban y encontraban empleo en un porcentaje similar al de aquellos que no recibían nada. Eso sí, experimentaron una mejora en su calidad de vida y en su salud.

2. Canadá. La región de Ontario comenzó a probar en 2017 con 4.000 personas la implantación de una renta básica universal para personas en edad de trabajar con ingresos bajos, complementando estos hasta con 900 euros mensuales. La intención de esta medida es mejorar la seguridad alimentaria, el estrés y ansiedad, la salud mental y física, la estabilidad habitacional, la educación y formación, el empleo y la participación en el mercado de trabajo. Pero con la llegada de un gobierno conservador, el programa se suprimió, así que, además de cortar de raíz los proyectos de aquellos que percibían la renta, nos quedamos sin saber si había funcionado.

3. Kenia. Un experimento similar comenzó en una aldea de este país africano, aunque aquí sólo se entregan 22 dólares al mes. Tras los buenos resultados, se amplió a más de 20.000 personas. Hasta el momento, las conclusiones del estudio son que quienes reciben la renta la usan en comprar productos de primera necesidad y que, incluso, los perceptores compran menos tabaco y alcohol que antes. Además, desaparecen los conflictos en las aldeas, porque todos se consideran iguales.

4. Dinamarca. Este país nórdico que, como todos ellos, mantiene extensas políticas activas de empleo, también cuenta con un ingreso mínimo vital que pueden solicitar aquellas personas que han sufrido reveses en su modo de vida, como perder el trabajo, un divorcio o una enfermedad grave. Este subsidio se cuantifica en función de la edad del beneficiario, de los hijos a cargo y del estado de salud, y se mueve en una franja que va desde los 476 hasta los 2.035 euros.

5. Italia. El país transalpino ha aprobado recientemente una renta mínima vital de hasta 780 euros, en función de la renta del beneficiario. Eso sí, es requisito imprescindible para recibirla ser ciudadano italiano o haber residido en el país durante al menos diez años. Además, mientras se cobra la renta se debe buscar empleo activamente.

6. Portugal. Nuestros vecinos mantienen una renta temporal y renovable, que dura un año y se encuentra supeditada a la firma de un contrato de inserción. El receptor debe también buscar activamente empleo. Su importe depende de la renta. Como ejemplo podemos decir que un mayor de 18 años con un hijo a cargo cobra unos 300 euros.

7. Alemania. Aquí, la renta mínima vital no la concede el estado central, sino los länder, o estados federados. Este beneficio económico está ligado a la búsqueda de un trabajo, así que quienes lo reciben están obligados a seguir las instrucciones de las oficinas de empleo. Una persona que vive sola cobra 424 euros, quien vive en un piso compartido 382. Además, se perciben hasta 302 euros por hijo a cargo.

viernes, 8 de mayo de 2020

Siete razones en contra del darwinismo social

El darwinismo social es una teoría que defiende la posibilidad de aplicar a las sociedades humanas la selección natural de Darwin. Como últimamente veo que muchas personas, conociendo la teoría o no, propugnan el uso de la ley del más fuerte en nuestras sociedades, creo que puedo exponer las aseveraciones del darwinismo social que no me parecen correctas.

1. Los menos adaptados deben ser eliminados. Esta afirmación permite a la sociedad no plantear ninguna política asistencial para los más desfavorecidos. En la actualidad a ningún político se le ocurriría negar en voz alta asistencia a las personas discapacitadas físicas, psíquicas o sensoriales. Pero muchos sí se la niegan a aquellos a los que la sociedad ha expulsado del mundo productivo. Aquél que no tiene trabajo es una mierda, pues según el darwinismo social, el que quiere, puede. El que no tiene trabajo puede montar su propia empresa y, si se esfuerza mucho, triunfará. Considero que se trata de una gran falacia, pues aplica la ley de la selva a la sociedad, estigmatizando a los que fracasan.

2. Biologismo. El darwinismo social y, en general, el neoliberalismo, se basan en la transposición de las leyes de la biología a la vida de las sociedades humanas, que en último extremo llevan a supeditar la lucha de clases a la lucha de razas. Por ello, es una doctrina que coquetea con la eugenesia y el racismo. El biologismo representa al hombre como un ser puramente biológico, tratando a la propiedad privada y al individualismo como instintos humanos, en lugar de como constructos sociales.

3. Desigualdad entre las personas. Una de las bases del darwinismo social es que no todas las personas somos iguales. Con ello cuestiona claramente la democracia. Si yo soy mejor que otra persona, mi voto no tiene por qué valer lo mismo que el de esa persona. ¿Cómo medimos el valor de una persona? Si, tal como dijeron Quevedo y Machado, somos como el necio, que confunde valor y precio, mediremos a las personas por el dinero que tienen. No hay muchos más parámetros cuantitativos para comparar seres humanos. Pero una persona que ha heredado su dinero no puede valer más que otra que ha conseguido todo su dinero (aunque sea menos) a base de esfuerzo. ¿Y si usamos el nivel de estudios? Pero ya sabemos que el nivel de estudios de los ricos es siempre mayor que el de los pobres, así que esto también se mide por el dinero que tienes.

4. La inteligencia define a cada persona. Se han usado durante mucho tiempo test de inteligencia que han pretendido catalogar a las personas con un número. Este tipo de determinismo biológico es incorrecto. En primer lugar, no existe una sola inteligencia, pues está demostrado que la memoria, el razonamiento y la habilidad verbal activan diferentes áreas del cerebro. Así, existen personas con poca capacidad de razonamiento pero con una memoria brillante, o personas con grandes habilidades lingüísticas que son incapaces de resolver un problema matemático. Además, siendo la inteligencia elástica, el entorno puede restringirla o realzarla.

5. Determinismo biológico. Esta parte del darwinismo social viene a decir, de una manera reduccionista, que el comportamiento de los seres humanos está determinado en sus genes, concluyendo que el comportamiento de una sociedad está determinado por la suma de los comportamientos genéticos de todos sus individuos. La conducta se encuentra determinada en la química y en la biología. Entonces, el egocentrismo, la maldad, la competitividad malsana de los seres humanos serían aceptables e inevitables, porque se encuentran en nuestros genes. Según esta teoría, el despiadado liberalismo sería la única forma natural de las sociedades humanas. Yo creo que se ha demostrado que existen mejores sociedades. Por ejemplo, las que se instauraron en Europa en la segunda mitad del siglo XX, aún siendo liberales, tenían un punto social que intentaba no dejar a nadie atrás.

6. Conductismo. Si la conducta de los seres humanos está determinada por sus genes, el darwinismo social afirma que podríamos manipularla. Así, los expertos conductistas podrían acabar con la criminalidad, encontrando la parte del cerebro donde reside la maldad de los criminales y extirpándola. También los expertos conductistas nos podrían hacer "salivar" cuando quisieran mediante determinados estímulos, como a los perros de Pavlov. Pero, incluso los más acérrimos conductistas, reconocen que hay una parte (muy grande, según muchos científicos) del comportamiento humano que procede de las experiencias adquiridas, es decir, del entorno.

7. La mano invisible y el obrero vago. En la actualidad se está intentando extender a la sociedad la teoría económica de la mano invisible, es decir, que la sociedad funciona sola y el estado debe intervenir poquito. Es una teoría que conviene mucho a los de arriba (que no necesitan del estado para seguir siendo ricos) y poco a los de abajo (que sin el estado podrían caer fácilmente en la indigencia). Pero, claro, el darwinismo social, en su esencia, quiere criminalizar al obrero que pierde su trabajo, pues es un vago que no quiere trabajar, opuesto al emprendedor, que arriesga su dinero y su trabajo.

Creo que ha quedado clara mi postura, contraria a la de la gran filósofa Susanita (la amiga de Mafalda), que decía que los pobres, además de ser pobres, compran cosas baratas y por eso les va como les va.

viernes, 24 de abril de 2020

De cómo la sociedad me dio una vida

Hoy, el día en que cumplo setenta años y en el que accedo a la jubilación de mi puesto de magistrado en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, me ha sido revelado. Podría decir que me lo olía, pero sería mentir, pues no había sospechado nunca nada, aunque me han pasado ciertas cosas poco comunes, como no haber suspendido un examen en toda mi vida.

Según me cuentan, todo empezó en primero de primaria, con la corrección de un dictado. Ese día fue la primera y última vez que hice trampas en mis estudios. El profesor escribió en la pizarra lo que nos acababa de dictar, y yo tenía todo perfecto, menos la tilde sobre una i. Decidí entonces añadirla disimuladamente. Cuando Don Alfonso preguntó, yo era el único que no había fallado, así que me hizo levantar y me puso como ejemplo al resto de la clase.

En realidad, y gracias al dictado, que había sido preparado al efecto por el Ministerio de Educación, mi maestro pudo comprobar que yo era una persona distinta a las demás. Es decir, que no poseía todas las capacidades del ser humano común. Casi todas las palabras que designan a alguien como yo suenan despectivas. Por eso nos llaman personas especiales.

Desde entonces, la sociedad me ha cuidado y ha encaminado mis pasos. Seguí mis estudios como todo el mundo, hasta graduarme en la universidad, como todo el mundo. Opté por el empleo público en el mundo jurídico y, tras preparar oposiciones, obtuve mi primer puesto en un juzgado de provincias, como todos los jueces novatos. Me casé y tuve hijos, como todo el mundo. Mi carrera profesional continuó en ascenso hasta la jubilación.

Y en todos mis pasos he sido tutelado sin que yo notara nada. Muchos de los que yo creía ayudantes eran trabajadores que hacían que mi vida se pareciera a la de los demás, sugiriéndome soluciones que yo creía haber encontrado solito, corrigiendo mis errores con sutileza o adecuando los problemas que se me planteaban a mis capacidades. Sin embargo (también me acaban de informar de esto), todo lo he conseguido gracias a mi esfuerzo. Si no hubiese estudiado tanto, si no hubiese trabajado con ahínco, no habría logrado llegar hasta aquí. Habría tenido otra profesión, pero no habría podido acceder a la judicatura adaptada.

Nuestra bendita comunidad, además de cuidar de todos sus individuos, sin excepción, también es completamente transparente. Por ello, si durante mi vida activa no convenía que conociese mi condición, porque me podría sentir frustrado, al llegar mi senectud la ley obliga a que se me informe, y así se ha hecho. A partir de ahora disfrutaré de mis días dorados sabiendo que no poseo las habilidades medias de mis congéneres. Sin embargo, gracias a las competencias que se me proporcionaron, mi retiro será sosegado y feliz.

¡Gracias, compatriotas!

martes, 14 de abril de 2020

Las siete mejores películas mudas

Las películas mudas pueden ser tan entretenidas como las que tienen sonido. Si no has visto cine mudo te estás perdiendo una parte muy importante de la historia, la que creó las claves del lenguaje cinematográfico. Como siempre, reseñaré las películas mudas que más me han influido o que han quedado mejor impregnadas en mi memoria, aunque podría haber incluido otras tantas, como Nosferatu, El maquinista de la general, Un perro andaluz, La madre, Luces de la ciudad, Avaricia, El gabinete del doctor Caligari, La que paga el pato o El hombre mosca.

1. El nacimiento de una nación (D. W. Griffith) (1915). Está considerada como la película que inventó el lenguaje cinematográfico, pues cuenta una historia completa, con conexión entre todas sus escenas. Para ello utiliza técnicas que ya existían, como el movimiento de cámara, el primer plano o el montaje paralelo, para ponerlas al servicio de la historia, influyendo de manera absoluta en todo el cine posterior. La tarea que se impuso Griffith no era fácil, ya que pretendía relatar la historia de los Estados Unidos de América desde la guerra civil, y a fe que lo consiguió creando una gran película. Lamentablemente, es de un racismo que da asco, así que hay que verla con distanciamiento, pero apreciando sus grandes logros. Nota de 7.

2. Intolerancia (D. W. Griffith) (1916). Para compensar el fanatismo que rezumaba su anterior obra, Griffith acometió otra colosal empresa, intentando criticar (sin conseguirlo del todo, me temo) la intolerancia que en el mundo ha habido, con cuatro relatos históricos que se van alternando durante el metraje. Cuenta con grandilocuencia y lujo de detalles la caída de Babilonia y un conflicto laboral de la época en que se rodó y, más someramente, la matanza de los hugonotes y la pasión de Cristo. Fue la primera película muda seria que vi, y me quedé asombrado, porque ya encontré en ella muchos trucos (persecuciones, salvamentos, montaje asociativo) que se siguen usando actualmente. Nota de 8.

3. El acorazado Potemkin (Sergei Einsestein) (1925). Película de propaganda comunista soviética, narra el motín que se produjo en el Potemkin, otorgándole la categoría de germen de la revolución de 1905. Es una cinta de referencia en todo el mundo, digna de estudio por parte de los profesionales del cine, por sus innovaciones estilísticas, como el montaje de atracciones. Sin embargo, los profanos también podemos disfrutarla, pues su gran fuerza expresiva consigue interesar y conmover. La escena de las escaleras ha sido tan homenajeada y parodiada, que ni te sorprenderá si nunca la has visto. Para el que quiera ser un cinéfilo es obligatoria. Nota de 8.

4. La quimera del oro (The gold rush) (Charles Chaplin) (1925). Una de las mejores comedias de todos los tiempos no solo usa el slapstick (cuidado con el oso), sino que también apela al corazón del espectador (tal vez en exceso) para que empatice con el buscador de oro solitario. Merece la pena ver cómo Charlot se comporta en la mesa, comiéndose una bota o jugando con el pan, pero también cómo debemos afrontar la vida, a pesar de nuestro patetismo sempiterno. Nunca me canso de verla. Nota de 8,5.

5. Metrópolis (Fritz Lang) (1927). Una de las películas icónicas del expresionismo alemán corresponde al género de ciencia ficción distópica. Nos cuenta con grandes medios y ampulosidad una historia sobre la alienación de la clase obrera en el siglo XXI, además de introducirnos en otros temas típicos, como la creación de clones. Aunque ahora nos parezca un poco conservadora en su resolución, es brillante en su planteamiento y en la manera de filmar el futuro, habiendo influido en numerosas obras posteriores. No cuento más, que la destripo, pero merece la pena. Nota de 8.

6. Garras humanas (The unknown) (Tod Browning) (1927). Tremenda, tortuosa, compleja, terrorífica, inmoral historia es la del hombre sin brazos enamorado de la amazona e hija del dueño del circo donde trabaja, una chica que no soporta que los hombres la manoseen. El autor de dos obras maestras como Drácula y Freaks apunta ya maneras en esta diabólica pero muy lírica obra, en la que aparecen dos actores que fueron grandes estrellas, Lon Chaney y Joan Crawford. Nota de 7,5.

7. Y el mundo marcha (The crowd) (King Vidor) (1928). Una película muda que te sorprende, pues es de las primeras que no trató un tema grandilocuente o histórico, sino la cotidiana vida de un joven y su (mediocre) familia en Nueva York. Sin embargo, consigue un tono épico gracias a las pequeñas heroicidades y tragedias de sus protagonistas, seres diluidos en una multitud muy bien retratada. La cinta es formalmente magnífica desde la primera escena (esas oficinas tantas veces imitadas); bebe del expresionismo, pero es realista (se ve un cuarto de baño con su inodoro y todo); y su moraleja es que no todo el mundo triunfa (más bien casi nadie) y debemos vivir con el hecho de que somo uno de tantos en la rueda del capitalismo. Nota de 8.